Trouvé 27 Résultats pour: Jeconías

  • Los hijos de Jeconías no se alegraron con las gentes de Bet Semes cuando vieron el arca del Señor, y el Señor hirió a setenta hombres de entre ellos. El pueblo hizo gran duelo porque el Señor los había castigado tan duramente. (I Samuel 6, 19)

  • Joaquín murió, y le sucedió en el trono su hijo Jeconías. (II Reyes 24, 6)

  • Jeconías tenía dieciocho años cuando subió al trono, y reinó tres meses en Jerusalén. Su madre se llamaba Nejustá, hija de Elnatán, de Jerusalén. (II Reyes 24, 8)

  • Entonces Jeconías, rey de Judá, salió al encuentro del rey de Babilonia, él y su madre, sus cortesanos, sus magnates y sus eunucos. Y el rey de Babilonia los capturó al año octavo de su reinado. (II Reyes 24, 12)

  • Llevó cautivos a Babilonia a Jeconías y a la madre del rey, a sus mujeres, a sus eunucos y a los nobles del país. (II Reyes 24, 15)

  • Y el rey de Babilonia, en lugar de Jeconías, puso por rey a Matanías, su tío, y le cambió el nombre en Sedecías. (II Reyes 24, 17)

  • El año treinta y siete de la cautividad de Jeconías, rey de Judá, el duodécimo mes, el día veintisiete del mes, Evil Merodac, rey de Babilonia, el año de su ascensión, indultó a Jeconías, rey de Judá, y lo sacó de la prisión. (II Reyes 25, 27)

  • De este modo Jeconías se quitó el traje de preso y comió a la mesa real todos los días de su vida. (II Reyes 25, 29)

  • Hijos de Joaquín: Jeconías y Sedecías. (I Crónicas 3, 16)

  • Hijos de Jeconías, el prisionero: Sealtiel, (I Crónicas 3, 17)

  • De los descendientes de Yishar, Jeconías y sus hijos estaban dedicados a los asuntos profanos de Israel como escribas y jueces. (I Crónicas 26, 29)

  • El resto de la historia de Joaquín, las iniquidades que cometió y todo lo que ocurrió, está escrito en el libro de los reyes de Israel y de Judá. Le sucedió en el trono su hijo Jeconías. (II Crónicas 36, 8)


“O verdadeiro servo de Deus é aquele que usa a caridade para com seu próximo, que está decidido a fazer a vontade de Deus a todo custo, que vive em profunda humildade e simplicidade”. São Padre Pio de Pietrelcina