Trouvé 15 Résultats pour: Gosen

  • Habitarás en la región de Gosen y estarás cerca de mí tú, tus hijos y tus nietos, tus rebaños, tus ganados y todo cuanto tienes. (Génesis 45, 10)

  • Israel envió por delante a Judá al encuentro de José, para comunicarle que viniera a verle a Gosen. Ellos llegaron a la región de Gosen. (Génesis 46, 28)

  • José hizo enganchar su carro y salió al encuentro de su padre, Israel, a Gosen. Al verlo, se echó a su cuello y lloró largamente abrazado a él. (Génesis 46, 29)

  • responderéis: Tus siervos se han ocupado de ganado desde su juventud hasta ahora, como antes nuestros padres. Así podréis quedaros a vivir en la región de Gosen, porque los egipcios detestan a los pastores". (Génesis 46, 34)

  • José fue a comunicárselo al Faraón: "Mi padre y mis hermanos han venido de Canaán con sus rebaños y ganados y con todo cuanto tienen y están ya en la región de Gosen". (Génesis 47, 1)

  • Y añadieron: "Hemos venido a habitar en este país porque en Canaán no hay pastos para los ganados de tus siervos y el hambre se ha agravado; permite que tus siervos habiten en la región de Gosen". (Génesis 47, 4)

  • todo Egipto está a tu disposición. Instala a tu padre y a tus hermanos en lo mejor del país; que se queden en la región de Gosen y, si sabes que entre ellos hay hombres de valía, ponlos de mayorales de mis ganados". (Génesis 47, 6)

  • Los israelitas se establecieron en Egipto en la región de Gosen, se posesionaron de ella y crecieron y se multiplicaron en gran manera. (Génesis 47, 27)

  • y toda la familia de su padre; solamente dejaron en la región de Gosen a sus niños y a sus rebaños y ganados. (Génesis 50, 8)

  • Pero exceptuaré la región de Gosen, donde habita mi pueblo; allí no habrá tábanos, para que sepas que yo, el Señor, estoy en medio del país. (Exodo 8, 18)

  • Solamente en la región de Gosen, donde habitaban los israelitas, no cayó granizo. (Exodo 9, 26)

  • Josué los derrotó desde Cades Barne hasta Gaza, y en todo el territorio de Gosen hasta Gabaón. (Josué 10, 41)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina