Trouvé 15 Résultats pour: voluntarias
Todos los israelitas, hombres y mujeres, cuyo corazón les había impulsado a llevar algo para cualquiera de los trabajos que Yahveh, por medio de Moisés, les había encomendado, presentaron sus ofrendas voluntarias a Yahveh. (Exodo 35, 29)
Recibieron de Moisés todas las ofrendas que los israelitas habían reservado para la ejecución de la obra del Santuario. Entre tanto los israelitas seguían entregando a Moisés cada mañana ofrendas voluntarias. (Exodo 36, 3)
sin contar los sábados de Yahveh, sin contar vuestros dones, sin contar todos vuestros votos, sin contar todas vuestras oblaciones voluntarias, las que ofrezcáis a Yahveh. (Levítico 23, 38)
Allí llevaréis vuestros holocaustos y vuestros sacrificios, vuestros diezmos y las ofrendas reservadas de vuestras manos, vuestras ofrendas votivas y vuestras ofrendas voluntarias, los primogénitos de vuestro ganado mayor y menor, (Deuteronomio 12, 6)
No podrás comer en tus ciudades el diezmo de tu trigo, de tu mosto o de tu aceite, ni los primogénitos de tu ganado mayor o menor, ninguna de tus ofrendas votivas o de tus ofrendas voluntarias, ni las ofrendas reservadas de tus manos. (Deuteronomio 12, 17)
Y el pueblo se alegró por estas ofrendas voluntarias; porque de todo corazón la habián ofrecido espontáneamente a Yahveh. También el rey David tuvo un gran gozo. (I Crónicas 29, 9)
El levita Qoré, hijo de Yimná, portero de la puerta oriental, estaba encargado de las ofrendas voluntarias hechas a Dios, y de repartir la ofrenda reservada a Yahveh y las cosas sacratísimas. (II Crónicas 31, 14)
También sus jefes reservaron ofrendas voluntarias para el pueblo, los sacerdotes y los levitas. Jilquías, Zacarías y Yejiel, intendentes de la Casa de Dios, dieron a los sacerdotes, como víctimas pascuales, 2.600 ovejas y trescientos bueyes. (II Crónicas 35, 8)
A todo el resto del pueblo, donde residan, que las gentes del lugar les ayuden proporcionándoles plata, oro, hacienda y ganado, así como ofrendas voluntarias para la Casa de Dios que está en Jerusalén.» (Esdras 1, 4)
y todos sus vecinos les proporcionaron toda clase de ayuda: plata, oro, hacienda, ganado, objetos preciosos en cantidad, además de toda clase de ofrendas voluntarias. (Esdras 1, 6)
Algunos de los cabezas de familia, al llegar a la Casa de Yahveh en Jerusalén, hicieron ofrendas voluntarias para la Casa de Dios, para que fuese reedificada en su mismo emplazamiento. (Esdras 2, 68)
así como toda la plata y el oro que hayas reunido de toda la provincia de Babilonia, con las ofrendas voluntarias que el pueblo y los sacerdotes hayan hecho para la Casa de su Dios en Jerusalén. (Esdras 7, 16)