Trouvé 124 Résultats pour: tinieblas

  • Él revela las cosas profundas y ocultas, conoce lo que está en las tinieblas y la luz habita junto a él. (Daniel 2, 22)

  • Luz y tinieblas, bendigan al Señor, ¡alábenlo y glorifíquenlo eternamente! (Daniel 3, 72)

  • ¡Día de tinieblas y oscuridad, día nublado y de sombríos nubarrones! Como la aurora que se extiende sobre las montañas, avanza un pueblo numeroso y fuerte como no lo hubo jamás, ni lo habrá después de él, hasta en las generaciones más lejanas. (Joel 2, 2)

  • El sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre, antes que llegue el Día del Señor, día grande y terrible. (Joel 3, 4)

  • Porque el que forma las montañas y crea el viento, el que descubre al hombre cuál es su designio, el que hace la aurora y las tinieblas, el que camina sobre las alturas de la tierra, se llama "Señor, Dios de los ejércitos". (Amós 4, 13)

  • El que hace las Pléyades y el Orión, el que cambia las tinieblas en aurora y la luz del día en oscuridad, el que convoca a las aguas del mar y las derrama sobre la tierra, se llama "el Señor". (Amós 5, 8)

  • ¡Ay de los que suspiran por el Día del Señor! ¿Qué será para ustedes el Día del Señor? ¡Será tinieblas y no luz! (Amós 5, 18)

  • ¡El Día del Señor será tinieblas y no luz, será oscuro, sin ningún resplandor! (Amós 5, 20)

  • Aquel día -oráculo del Señor- yo haré que el sol se ponga al mediodía, y en pleno día cubriré la tierra de tinieblas; (Amós 8, 9)

  • Por eso, ustedes tendrán noches sin visiones, y tinieblas en vez de presagios. El sol se ocultará para los profetas y el día se les oscurecerá. (Miqueas 3, 6)

  • No te alegres de mi suerte, enemiga mía, porque si he caído, me levantaré; si habito en las tinieblas, el Señor es mi luz. (Miqueas 7, 8)

  • cuando pasa la inundación; aniquila a los que se rebelan contra él y persigue a sus enemigos en las tinieblas. (Nahún 1, 8)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina