Löydetty 69 Tulokset: ofrendas

  • y lo mismo para las ofrendas de leña a plazos fijos y para las primicias. ¡Acuérdate de mí, Dios mío, para mi bien! (Nehemías 13, 31)

  • El sumo sacerdote Yoyaquim y todos los que estaban delante del Señor, sacerdotes y ministros del Señor, ceñidos de sayal, ofrecían el holocausto perpetuo, las oraciones y las ofrendas voluntarias del pueblo, (Judit 4, 14)

  • Cuando llegaron a Jerusalén, adoraron a Dios, y una vez purificado el pueblo, ofrecieron sus holocaustos, sus ofrendas voluntarias y sus regalos. (Judit 16, 18)

  • Se acuerde de todas tus ofrendas, halle sabroso tu holocausto; (Salmos 20, 4)

  • rendid a Yahveh la gloria de su nombre. Traed ofrendas y en sus atrios entrad, (Salmos 96, 8)

  • Cuando el hecho se divulgó y se refirió al rey de los persas que en el lugar donde los sacerdotes deportados habían escondido el fuego, había aparecido aquel líquido con el que habían santificado las ofrendas del sacrificio Nehemías y sus compañeros, (II Macabeos 1, 33)

  • Como Moisés oró al Señor y bajó del cielo fuego, que devoró las ofrendas del sacrificio, así también oró Salomón y bajó fuego que consumió los holocaustos. (II Macabeos 2, 10)

  • Lo mismo se narraba también en los archivos y en las Memorias del tiempo de Nehemías; y cómo éste, para fundar una biblioteca, reunió los libros referentes a los reyes y a los profetas, los de David y las cartas de los reyes acerca de las ofrendas. (II Macabeos 2, 13)

  • Con sus manos impuras tomó los vasos sagrados y arrebató con sus manos profanas las ofrendas presentadas por otros reyes para acrecentamiento de la gloria y honra del Lugar. (II Macabeos 5, 16)

  • Teme al Señor y honra el sacerdote, dale su porción como te está prescrito: primicias, sacrificios de reparación, pierna de las ofrendas, oblación de santidad y primicias de las cosas sagradas. (Eclesiástico 7, 31)

  • Hijo, trátate bien, conforme a lo que tengas, y presenta dignamente tus ofrendas al Señor. (Eclesiástico 14, 11)

  • Manjares derramados sobre boca cerrada, eso son las ofrendas de alimentos puestas sobre una tumba. (Eclesiástico 30, 18)


“A cada vitória sobre o pecado corresponde um grau de glória eterna”. São Padre Pio de Pietrelcina