Löydetty 294 Tulokset: Envió

  • decía Abraham de su mujer Sara: «Es mi hermana.» Entonces el rey de Guerar, Abimélek, envió por Sara y la tomó. (Génesis 20, 2)

  • Se dio aviso a Rebeca de las palabras de Esaú, su hijo mayor; y ella envió a llamar a Jacob, su hijo pequeño, y le dijo: «Mira que tu hermano Esaú va a vengarse de ti matándote. (Génesis 27, 42)

  • Jacob envió a llamar a Raquel y a Lía al campo, donde estaba su rebaño, (Génesis 31, 4)

  • Jacob envió mensajeros por delante hacia su hermano Esaú, al país de Seír, la estepa de Edom, (Génesis 32, 4)

  • Díjole: «Anda, vete a ver si tus hermanos siguen sin novedad, y lo mismo el ganado, y tráeme noticias.» Le envió, pues, desde el valle de Hebrón, y José fue a Siquem. (Génesis 37, 14)

  • Judá, por su parte, envió el cabrito por mediación de su compañero el adulamita, para rescatar la prenda de manos de la mujer, pero éste no la encontró. (Génesis 38, 20)

  • Pero cuando ya la sacaban, envió ella un recado a su suegro: «Del hombre a quien esto pertenece estoy encinta», y añadía: «Examina, por favor, de quién es este sello, este cordón y este bastón.» (Génesis 38, 25)

  • Aquella mañana estaba inquieto su espíritu y envió a llamar a todos los magos y a todos los sabios de Egipto. Faraón les contó su sueño, pero no hubo quien se lo interpretara a Faraón. (Génesis 41, 8)

  • pero a Benjamín, hermano de José, no le envió Jacob con sus hermanos, pues se decía: «No vaya a sucederle alguna desgracia.» (Génesis 42, 4)

  • Ahora bien, no os pese mal, ni os dé enojo el haberme vendido acá, pues para salvar vidas me envió Dios delante de vosotros. (Génesis 45, 5)

  • A su padre le envió asimismo diez burros cargados de lo mejor de Egipto y diez asnas cargadas de trigo, pan y víveres para el viaje de su padre. (Génesis 45, 23)

  • Bajó la hija de Faraón a bañarse en el Río y, mientras sus doncellas se paseaban por la orilla del Río, divisó la cestilla entre los juncos, y envió una criada suya para que la cogiera. (Exodo 2, 5)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina