Löydetty 63 Tulokset: impío

  • Por eso el Señor no perdona a sus jóvenes ni se compadece de sus huérfanos y de sus viudas, porque todo este pueblo es impío y malvado y toda boca profiere insensateces. A pesar de todo esto, no se aplacó su ira y su mano está aún extendida. (Isaías 9, 16)

  • Ustedes hacen sufrir al justo con engaños, cuando yo no lo hago sufrir, y reconfortan al impío para que no se convierta de su mala conducta y salve su vida. (Ezequiel 13, 22)

  • Tú dirás a la tierra de Israel: Así habla el Señor: Aquí estoy contra ti: yo sacaré mi espada de su vaina y extirparé de ti al justo y al impío. (Ezequiel 21, 8)

  • Porque quiero extirpar de ti al justo y al impío, por eso saldrá mi espada de su vaina contra todos ustedes, desde el sur hasta el norte. (Ezequiel 21, 9)

  • Y tú, hijo de hombre, di a la gente de tu pueblo: Al justo no lo librará su justicia si comete un delito; al impío no lo hará sucumbir su maldad si se convierte de ella. Y cuando un justo peque, no podrá sobrevivir a causa de su justicia. (Ezequiel 33, 12)

  • ¿Tendré que tolerar todavía en la casa del impío los tesoros mal adquiridos y la execrable medida rebajada? (Miqueas 6, 10)

  • Por eso la Ley no tiene vigencia y el derecho no aparece jamás: ¡sí, el impío asedia al justo, por eso sale a luz un derecho falseado! (Habacuc 1, 4)

  • Tus ojos son demasiado puros para mirar el mal y no puedes contemplar la opresión. ¿Por qué, entonces, contemplas a los traidores y callas cuando el impío devora a uno más justo que él? (Habacuc 1, 13)

  • Has salido para salvar a tu pueblo, para salvar a tu Ungido; has abatido el techo de la casa del impío, has descubierto sus cimientos hasta la roca. Pausa (Habacuc 3, 13)

  • Ustedes volverán a ver la diferencia entre el justo y el impío, entre el que sirve a Dios y el que no lo sirve. (Malaquías 3, 18)

  • Pero al que no hace nada, sino que cree en aquel que justifica al impío, se le tiene en cuenta la fe para su justificación. (Romanos 4, 5)

  • Que nadie los engañe de ninguna manera. Porque antes tiene que venir la apostasía y manifestarse el hombre impío, el Ser condenado a la perdición, (II Tesalonicenses 2, 3)


“Deus ama quem segue o caminho da virtude.” São Padre Pio de Pietrelcina