Löydetty 61 Tulokset: Hagas

  • exceptuando únicamente el árbol del conocimiento del bien y del mal. De él no deberás comer, porque el día que lo hagas quedarás sujeto a la muerte". (Génesis 2, 17)

  • Y el Ángel le dijo: "No pongas tu mano sobre el muchacho ni le hagas ningún daño. Ahora sé que temes a Dios, porque no me has negado ni siquiera a tu hijo único". (Génesis 22, 12)

  • "Yo estaré contigo, le dijo Dios, y esta es la señal de que soy yo el que te envía: después que hagas salir de Egipto al pueblo, ustedes darán culto a Dios en esta montaña". (Exodo 3, 12)

  • El Faraón dijo a Moisés: "¡Fuera de aquí! Y no te atrevas a comparecer otra vez en mi presencia, porque apenas lo hagas, morirás". (Exodo 10, 28)

  • Cuando hagas un censo de los israelitas, cada uno pagará al Señor el rescate de su vida, para que no recaiga sobre ellos ninguna calamidad con ocasión del empadronamiento. (Exodo 30, 12)

  • Moisés agregó: "Si no vienes personalmente, no nos hagas partir de aquí. (Exodo 33, 15)

  • No hagas ningún pacto con los habitantes del país donde vas a entrar, porque ellos serían una trampa para ti. (Exodo 34, 12)

  • No hagas ningún pacto con los habitantes de aquel país, no sea que cuando ellos se prostituyan con sus dioses y les ofrezcan sacrificios, te inviten también a ti y tengas que comer de las víctimas sacrificadas. (Exodo 34, 15)

  • dijo a Moisés: "Por favor, señor, no hagas pesar sobre nosotros el pecado que hemos cometido por necedad. (Números 12, 11)

  • Durante la noche, Dios se manifestó a Balaam y le dijo: "Si esta gente ha venido a buscarte, puedes ir con ellos. Pero no hagas nada fuera de lo que yo te ordene". (Números 22, 20)

  • Si estás dispuesto a hacernos un favor, continuaron diciendo, que se nos dé esa tierra en posesión. No nos hagas cruzar el Jordán". (Números 32, 5)

  • No hagas impuro el país donde vives y en el cual yo habito. Porque yo, el Señor, habito entre los israelitas. (Números 35, 34)


“Façamos o bem, enquanto temos tempo à nossa disposição. Assim, daremos glória ao nosso Pai celeste, santificaremos nós mesmos e daremos bom exemplo aos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina