Löydetty 136 Tulokset: viento

  • Miré de cerca todo lo que se hace bajo el sol: ¡no se tiene nada, se corre tras el viento! (Eclesiastés (Qohelet) 1, 14)

  • Me dediqué a ver dónde están la sabiduría y la ciencia, la estupidez y la locura. Pero ahora veo que aun eso es correr tras el viento. (Eclesiastés (Qohelet) 1, 17)

  • Me dije: "Vamos, encontremos la alegría, y que yo pruebe la felicidad!". Pero eso también no es más que un viento. (Eclesiastés (Qohelet) 2, 1)

  • Luego reflexioné en todas las obras que había emprendido y en todas las molestias que me había costado su realización. Pues bien, no se retiene nada, se corre tras el viento; ¡no hay nada que ganar bajo el sol! (Eclesiastés (Qohelet) 2, 11)

  • Y encontré la vida detestable: para mí todo lo que se hace bajo el sol es un mal negocio; todo se nos escapa, se corre tras el viento. (Eclesiastés (Qohelet) 2, 17)

  • Pues ¿quién puede comer o beber si no es gracias a él? Dios da a quien quiere la sabiduría, la ciencia y la alegría; el pecador tendrá la carga de amontonar y de enriquecerse para que todo pase a manos del que agrada a Dios. También allí habrá decepción: se habrá corrido tras el viento. (Eclesiastés (Qohelet) 2, 25)

  • Si miro todo el trabajo que los hombres se dan, toda la carrera tras el éxito, eso no es más que envidia del uno para el otro. ¡Todo eso es insensato, se corre tras el viento! (Eclesiastés (Qohelet) 4, 4)

  • Interminable era la multitud de los que venían a rendirle homenaje. Un día, sin embargo, no estarán más contentos con él. Esas son pues cosas que no duran: se corre tras el viento. (Eclesiastés (Qohelet) 4, 16)

  • También esto es una mala suerte: irse en el mismo estado en que uno llegó. ¿Qué más ha hecho sino trabajar para el viento? (Eclesiastés (Qohelet) 5, 15)

  • Más vale creer en lo que se ve que dejarse llevar por sus deseos: pues allí también no se retiene nada y se corre tras el viento. (Eclesiastés (Qohelet) 6, 9)

  • Observar al viento, no es sembrar; considerar las nubes, no es cosechar. (Eclesiastés (Qohelet) 11, 4)

  • Aunque por un tiempo echen brotes, sus débiles ramas serán sacudidas por el viento, y arrancadas por la tempestad. (Sabiduría 4, 4)


“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina