Löydetty 369 Tulokset: gloria

  • Murió al fin de una vejez dichosa, lleno de días, de riquezas y gloria; y le sucedió en el trono su hijo Salomón. (1 Crónicas 29, 28)

  • Yavé dijo a Salomón: «Ya que éste es tu deseo y no has pedido riquezas ni bienes, ni gloria ni la muerte de tus enemigos, ni tampoco has pedido larga vida, sino que me has pedido la sabiduría y el entendimiento para gobernar a mi pueblo, del cual te he hecho rey, (2 Crónicas 1, 11)

  • por eso desde ahora te doy sabiduría y entendimiento, y además te daré riquezas, bienes y gloria como no las tuvieron nunca los reyes que fueron antes de ti, ni las tendrá ninguno de los que vengan después de ti.» (2 Crónicas 1, 12)

  • en ese momento la Casa se llenó de la nube de la Gloria de Yavé y los sacerdotes no pudieron continuar en su servicio a causa de la nube, porque la Gloria de Yavé llenaba la Casa de Dios. (2 Crónicas 5, 14)

  • Cuando Salomón acabó de rezar, bajó fuego del cielo que devoró el holocausto y los sacrificios mientras la Gloria de Yavé llenó la Casa. (2 Crónicas 7, 1)

  • Los sacerdotes no podían entrar en la Casa de Yavé, porque su Gloria la llenaba. (2 Crónicas 7, 2)

  • Entonces todos los hijos de Israel, viendo descender el fuego y la Gloria de Yavé sobre la Casa, se postraron sobre el pavimento, adoraron y alabaron a Yavé: «Porque es bueno, porque es eterno su amor.» (2 Crónicas 7, 3)

  • Ezequías tuvo riquezas y gloria en gran abundancia. Adquirió tesoros de plata, oro, piedras preciosas, bálsamos, joyas y de toda suerte de objetos de valor. (2 Crónicas 32, 27)

  • Yo soy Rafael, uno de los siete ángeles que tienen entrada a la Gloria del Señor.» (Tobías 12, 15)

  • Señor es tu nombre. ¡Quebranta su fuerza con tu poder! ¡Derriba su dominio con tu ira!, pues pretenden profanar tu Santuario, manchar la Tienda donde se encuentra la gloria de tu Nombre y destruir con hierro los cuernos de tu altar. (Judit 9, 8)

  • «¡Que el Dios de nuestros padres te conceda gracia y dé éxito a tus planes para gloria de Israel y de Jerusalén!» (Judit 10, 8)

  • Todos se habían ido de la carpa de Holofernes, y nadie, grande o pequeño, se había quedado en el dormitorio. Judit, de pie al lado de la cama, dijo interiormente: «Señor, Dios de toda fortaleza, favorece en esta hora lo que voy a hacer para gloria de Jerusalén. (Judit 13, 4)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina