Löydetty 20 Tulokset: Menelao

  • Tres años después, Jasón envió a Menelao, hermano del ya mencionado Simón, para llevar el dinero al rey y gestionar la negociación de asuntos urgentes. (2 Macabeos 4, 23)

  • Menelao se hizo presentar al rey, a quien impresionó por su aire de persona de autoridad, y logró el cargo de Sumo Sacerdote, ofreciendo trescientos talentos de plata más que Jasón. (2 Macabeos 4, 24)

  • Menelao tenía el poder, pero nada pagaba del dinero prometido al rey, (2 Macabeos 4, 27)

  • Menelao dejó como su reemplazante a su hermano Lisímaco, y Sóstrato a Crates, jefe de los chipriotas. (2 Macabeos 4, 29)

  • Menelao pensó aprovechar aquella oportunidad, y robó algunos objetos de oro del Templo, que regaló a Andrónico; también logró vender otros en Tiro y en las ciudades de los alrededores. (2 Macabeos 4, 32)

  • Cuando Onías ya no pudo dudar de lo que había hecho Menelao, se refugió en Dafne, cerca de Antioquía, lugar de asilo, y desde allí lo denunció. (2 Macabeos 4, 33)

  • Por esto, Menelao, a solas con Andrónico, lo incitaba a que acabara con Onías. Andrónico fue donde Onías y se ganó con engaño su confianza, estrechando su mano y dándole la mano con juramento; persuadió a Onías, aunque a éste no le faltaban sospechas, a salir de su refugio, e inmediatamente le dio muerte, sin respeto alguno de la justicia. (2 Macabeos 4, 34)

  • Lisímaco cometió muchos robos sacrílegos en Jerusalén con el consentimiento de Menelao, y, como la cosa se supo, la multitud se amotinó contra Lisímaco, después que muchos objetos de oro ya habían salido de la ciudad. (2 Macabeos 4, 39)

  • A propósito de estos hechos se hizo un proceso contra Menelao. (2 Macabeos 4, 43)

  • Viéndose perdido, Menelao prometió una gran cantidad de dinero a Tolomeo, hijo de Dorímenes, para que dispusiera al rey en su favor. (2 Macabeos 4, 45)

  • de modo que absolvió de todas las acusaciones a Menelao, el causante de todos los males. Más aún, condenó a muerte a sus infelices acusadores que hubieran sido absueltos, aun cuando los hubiera juzgado un tribunal de bárbaros. (2 Macabeos 4, 47)

  • Menelao quedó en el poder, gracias a la corrupción de los gobernantes, cada vez más criminal, convertido en tirano de su pueblo. (2 Macabeos 4, 50)


“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina