Exodo, 37
22. Los capullos y los brazos formaban un cuerpo con el candelabro. Todo ello era de oro puro macizo.
22. Los capullos y los brazos formaban un cuerpo con el candelabro. Todo ello era de oro puro macizo.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina