42. Trae acá a tu hijo.» Cuando el muchacho se acercaba, el demonio lo arrojó al suelo con violentas sacudidas. Pero Jesús habló al espíritu malo en tono dominante, curó al muchacho y se lo devolvió a su padre.





“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina