4. Mirad, yo he repartido entre vosotros por suerte, como heredad para vuestras tribus, estos pueblos que han quedado, lo mismo que aquellos que yo he exterminado desde el Jordán hasta el mar Mediterráneo, a occidente.





“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina