4. No sean como sus padres, a quienes los antiguos profetas interpelaron, diciendo: Así habla el Señor de los ejércitos: Vuelvan de sus malos caminos y de sus malas acciones. Pero ellos no escucharon, ni me prestaron atención -oráculo del Señor-.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina