1. Josué, hijo de Nun, envió clandestinamente desde Sitím a dos espías, con la siguiente consigna: "Vayan a observar el terreno". Ellos partieron y, al llegar a Jericó, entraron en casa de una prostituta llamada Rajab, donde se alojaron.





“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina