Fundar 526 Resultados para: palabras

  • Yo escribiré sobre las tablas las palabras escritas sobre las primeras, que tú rompiste, y luego las guardarás en el arca. (Deuteronomio 10, 2)

  • Grabad en vuestro corazón y en vuestra alma estas palabras que hoy os digo, atadlas a vuestras manos como señal y ponedlas como frontal entre vuestros ojos. (Deuteronomio 11, 18)

  • no escuches las palabras de tal profeta ni los sueños de tal soñador. El Señor, vuestro Dios, quiere probaros para ver si realmente le amáis con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma. (Deuteronomio 13, 4)

  • La tendrá consigo y la leerá todos los días de su vida, para que aprenda a respetar a su Dios, guardando todas sus palabras y poniendo en práctica todas sus prescripciones, (Deuteronomio 17, 19)

  • Yo les suscitaré de en medio de sus hermanos un profeta como tú; pondré mis palabras en su boca, y él les dirá todo lo que yo le mande. (Deuteronomio 18, 18)

  • Al que no escuche las palabras que él dirá en mi nombre, yo mismo le pediré cuentas. (Deuteronomio 18, 19)

  • y escribirás en ellas todas las palabras de esta ley cuando hayas cruzado para entrar en la tierra que el Señor, tu Dios, te da, tierra que mana leche y miel, como te lo ha prometido el Señor, el Dios de tus padres. (Deuteronomio 27, 3)

  • Sobre las piedras escribirás con caracteres bien claros todas las palabras de esta ley". (Deuteronomio 27, 8)

  • ¡Maldito el que no se atenga a las palabras de esta ley y no las ponga en práctica! Y todo el pueblo responderá: ¡Amén! (Deuteronomio 27, 26)

  • Si no pones en práctica todas las palabras de esta ley, escrita en este libro; si no respetas este glorioso e imponente nombre del Señor, tu Dios, (Deuteronomio 28, 58)

  • Por tanto, guardad las palabras de esta alianza y ponedlas en práctica para que tengáis éxito en todas vuestras empresas. (Deuteronomio 29, 8)

  • Si alguno, después de haber oído las palabras de este juramento, se hace ilusiones y dice: Todo me saldrá bien, aunque haga lo que me dé la gana, pues la abundancia de agua apaga la sed, (Deuteronomio 29, 18)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina