Fundar 120 Resultados para: Samaría

  • Así que dieron la voz de alarma a los montes de Samaría, Coná, Bejorón, Belmain, Jericó, Joba, Ajsora y al valle de Salén. (Judit 4, 4)

  • De hoy en adelante renuncio para siempre al tercio de la cosecha y a la mitad de la de los árboles frutales que me pertenecen en la región de Judea y en los tres distritos anexionados de Samaría y Galilea; (I Macabeos 10, 30)

  • Los tres distritos de Samaría agregados a Judea se considerarán como parte de Judea, de modo que dependan de un solo jefe y obedezcan solamente al sumo sacerdote. (I Macabeos 10, 38)

  • Jonatán pidió al rey exenciones de impuestos para Judea y para los tres distritos de Samaría, prometiéndole a cambio diez mil kilos de plata. (I Macabeos 11, 28)

  • Les confirmamos la posesión de los territorios de Judea y de los tres distritos de Aferema, Lida y Ramatáyim. Son desmembrados de Samaría, pasando a Judea, junto con sus dependencias, en favor de todos los que van a ofrecer sacrificios en Jerusalén, y en lugar de los tributos que el rey percibía todos los años, hasta ahora, por los productos de la tierra y por los frutos de los árboles. (I Macabeos 11, 34)

  • Nicanor, enterado de que Judas y su gente andaban por Samaría, se dispuso a atacarlos con toda seguridad un día de sábado. (II Macabeos 15, 1)

  • capital de Efraín es Samaría, y cabeza de Samaría el hijo de Romelías. Dentro de cinco o seis años, Efraín será destruido, dejará de ser pueblo. Si no creéis, no podréis subsistir. (Isaías 7, 9)

  • porque antes que el niño sepa decir papá y mamá, la riqueza de Damasco y el botín de Samaría serán llevados ante el rey de Asiria". (Isaías 8, 4)

  • El pueblo entero lo sabrá; Efraín y los habitantes de Samaría, que dicen en su orgullo, en la soberbia de su corazón: (Isaías 9, 8)

  • ¿No es Calne como Cárquemis, Jamat igual que Arpad y Samaría como Damasco? (Isaías 10, 9)

  • Como mi mano ha herido los reinos de los ídolos, más repletos de imágenes que Jerusalén y Samaría; (Isaías 10, 10)

  • lo mismo que hice con Samaría y sus ídolos, ¿no podré hacerlo con Jerusalén y sus imágenes? (Isaías 10, 11)


“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina