Fundar 18 Resultados para: revistió

  • Cuando Salomón terminó de construir la Casa, la revistió de un artesonado con paneles y armadura de cedro. (I Reyes 6, 9)

  • revistió sus muros interiores con planchas de cedro, desde el suelo de la Casa hasta los postes del artesonado; revistió de madera el interior y recubrió el suelo de la Casa con planchas de ciprés. (I Reyes 6, 15)

  • Los diez metros del fondo de la Casa los revistió con planchas de cedro, desde el suelo hasta los postes, y reservó ese espacio interior para el lugar santísimo, el Santo de los santos. (I Reyes 6, 16)

  • Salomón recubrió de oro fino el interior de la Casa e hizo pasar cadenas de oro por delante del lugar santísimo, al que revistió de oro. (I Reyes 6, 21)

  • También a los querubines los revistió de oro. (I Reyes 6, 28)

  • Y revistió de oro el suelo de la Casa, dentro y fuera del lugar santísimo. (I Reyes 6, 30)

  • Sobre las dos hojas de madera de olivo, hizo cincelar querubines, palmeras y pimpollos; revistió de oro las puertas, y aplicó oro laminado sobre los querubines y las palmeras. (I Reyes 6, 32)

  • Hizo esculpir querubines, palmeras y pimpollos, y los revistió de oro, bien aplicado a los relieves. (I Reyes 6, 35)

  • A la nave central la revistió de madera de ciprés y luego la recubrió de oro fino, sobre el que hizo representar palmeras y guirnaldas. (II Crónicas 3, 5)

  • También revistió de oro los postes, los umbrales, los muros y las puertas de la nave, e hizo grabar querubines sobre las paredes. (II Crónicas 3, 7)

  • Hizo asimismo el recinto del Santo de los santos: su longitud, que cubría todo el ancho de la Casa, era de diez metros, y tenía diez metros de ancho. Y lo revistió con seiscientos talentos de oro fino. (II Crónicas 3, 8)

  • Hizo dos querubines, obra de escultores, en el interior del Santo de los santos, y se los revistió de oro. (II Crónicas 3, 10)


“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina