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  • y la comerán Aarón y sus hijos, junto con el pan del canastillo, a la entrada de la Tienda de las Citas. (Exodo 29, 32)

  • Este es el holocausto perpetuo que se ofrecerá a Yavé de generación en generación a la entrada de la Tienda de las Citas, allí mismo donde me encuentro contigo para hablarte. (Exodo 29, 42)

  • Se colocó, pues, a la entrada del campamento y llamó en voz alta: «¡Vengan a mí los que estén por Yavé!» Todos los de la tribu de Leví se juntaron en torno a él. (Exodo 32, 26)

  • El les dijo: «Esta es orden de Yavé, el Dios de Israel: Colóquense cada uno su espada al costado y pasen y repasen por el campamento, de una entrada a la otra; y no vacilen en matar a sus hermanos, compañeros y familiares.» (Exodo 32, 27)

  • Cada vez que Moisés iba a la Tienda de las Citas, todo el pueblo se ponía de pie a la entrada de sus carpas, y los ojos de todos lo seguían, hasta que entraba en ella. (Exodo 33, 8)

  • Y al entrar Moisés en la Tienda, la nube en forma de columna bajaba y se detenía a la entrada de la Tienda, mientras Yavé hablaba a Moisés. (Exodo 33, 9)

  • Cuando el pueblo veía la nube parada junto a la entrada de la Tienda, todos se ponían de pie y luego se postraban cada uno ante su carpa. (Exodo 33, 10)

  • el altar del incienso con sus varas; el óleo de la unción, el incienso aromático, la cortina para la entrada de la Morada, (Exodo 35, 15)

  • los cortinajes del atrio con sus postes y sus basas; la cortina de la entrada del atrio; (Exodo 35, 17)

  • Hizo para la entrada de la Morada una cortina de lino fino color morado, púrpura y de grana dos veces teñida, con labores de tapicería. (Exodo 36, 37)

  • Hizo también la pileta y la basa de bronce, con los espejos de bronce pulido de las mujeres que servían a la entrada de la Tienda de las Citas. (Exodo 38, 8)

  • Pero a la entrada del atrio se puso una cortina de diez metros de lino fino retorcido color morado, púrpura y de grana dos veces teñida: una obra de bordador. Tenía diez metros de largo y dos y medio de altura, como las cortinas del atrio. (Exodo 38, 18)


“Feliz a alma que atinge o nível de perfeição que Deus deseja!” São Padre Pio de Pietrelcina