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  • Acuérdate de tus siervos Abrahán, Isaac y Jacob y olvida que este pueblo es pesado, malo y pecador. (Deuteronomio 9, 27)

  • Apenas el hombre nombró el Arca de Dios, Helí cayó de su silla hacia atrás junto a la puerta, se rompió la nuca y murió, pues era viejo y pesado. Hacía cuarenta años que mandaba en Israel. (1 Samuel 4, 18)

  • Cuando se cortaba el cabello, llegaba éste a pesar cerca de un kilo y medio. Y se lo cortaba una vez al año, porque se le ponía tan pesado que se veía obligado a hacerlo. (2 Samuel 14, 26)

  • «Tu padre nos ha impuesto un yugo pesado; alivia tú los duros trabajos que nos exigió, y el yugo pesado que nos impuso, y te serviremos.» (1 Reyes 12, 4)

  • «Tu padre ha hecho pesado nuestro yugo; ahora tú aligera la dura servidumbre de tu padre y el pesado yugo que puso sobre nosotros y te serviremos.» (2 Crónicas 10, 4)

  • Los jóvenes que se habían criado con él le respondieron: «Esto debes responder al pueblo que te ha dicho: Tu padre hizo pesado nuestro yugo, ahora tú aligera nuestro yugo; diles: Mi dedo meñique es más grueso que los lomos de mi padre. (2 Crónicas 10, 10)

  • Un yugo pesado les cargó mi padre, pero yo les haré más pesado el yugo: mi padre los ha azotado con azotes, pero yo los azotaré con escorpiones.» (2 Crónicas 10, 11)

  • Les dijo: «Mi padre hizo pesado el yugo de ustedes, yo lo haré más pesado todavía; mi padre los azotó con azotes, pero yo los azotaré con escorpiones.» (2 Crónicas 10, 14)

  • Entonces, los sacerdotes y levitas recibieron todo lo que habíamos pesado: la plata, el oro y los vasos, para llevarlos a Jerusalén a la Casa de nuestro Dios. (Esdras 8, 30)

  • Mis culpas llegan más arriba de mi cabeza, pesan sobre mí más que un fardo pesado. (Salmos 38, 5)

  • tu cólera ha pesado sobre mí y me han arrollado todas tus olas. (Salmos 88, 8)

  • Referente al mal que causó el rey Demetrio a los judíos, le hemos escrito así: «¿Por qué mantienes tan pesado yugo sobre los judíos, nuestros amigos y aliados? (1 Macabeos 8, 31)


“Deus nunca me recusou um pedido”. São Padre Pio de Pietrelcina