17. Las vecinas decían: «A Noemí le ha nacido un hijo». Y lo llamaron Obed. Obed fue el padre de Jesé y éste padre de David.





“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina