7. Isaac rompió el silencio y dijo a su padre Abraham: "¡Padre!". Él respondió: "Sí, hijo mío". "Tenemos el fuego y la leña, continuó Isaac, pero ¿dónde está el cordero para el holocausto?".





“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina