Ezequiel, 37
2. Luego me hizo pasar a través de ellos en todas las direcciones, y vi que los huesos tendidos en el valle eran muy numerosos y estaban resecos.
2. Luego me hizo pasar a través de ellos en todas las direcciones, y vi que los huesos tendidos en el valle eran muy numerosos y estaban resecos.
“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina