Found 56 Results for: principio

  • Al principio Dios creó el cielo y la tierra. (Génesis 1, 1)

  • Y le pusieron el nombre de Dan, en memoria de su antepasado Dan, que había nacido de Israel. Pero al principio la ciudad se llamaba Lais. (Jueces 18, 29)

  • Los hechos de Roboám, desde el principio hasta el fin, están escritos en las Crónicas del profeta Semaías y del vidente Idó, para ser registrados en las genealogías. Roboám y Jeroboám estuvieron continuamente en guerra. (II Crónicas 12, 15)

  • En cuanto a los hechos de Asá, desde el principio hasta el fin, están escritos en el Libro de los reyes de Judá y de Israel. (II Crónicas 16, 11)

  • Pero tú, Señor, eres mi Rey desde el principio, tú lograste victorias en medio de la tierra: (Salmos 74, 12)

  • Él hizo todas las cosas apropiadas a su tiempo, pero también puso en el corazón del hombre el sentido del tiempo pasado y futuro, sin que el hombre pueda descubrir la obra que hace Dios desde el principio hasta el fin. (Eclesiastés 3, 11)

  • Tú me ordenaste construir un Templo sobre tu santa montaña y un altar en la ciudad donde habitas, réplica del santo Tabernáculo que habías preparado desde el principio. (Sabiduría 9, 8)

  • porque una maldición pesaba sobre esa raza desde el principio. Y no fue por temor de nadie que les ofrecías dejar impunes sus pecados. (Sabiduría 12, 11)

  • Porque tu fuerza es el principio de tu justicia, y tu dominio sobre todas las cosas te hace indulgente con todos. (Sabiduría 12, 16)

  • Así, en el principio, mientras perecían los gigantes orgullosos, la esperanza del mundo se refugió en una frágil embarcación, que, dirigida por tu mano, dejó al futuro el germen de nuevas generaciones. (Sabiduría 14, 6)

  • Ellos no existían al principio ni existirán para siempre, (Sabiduría 14, 13)

  • Porque el culto de los ídolos sin nombre es principio, causa y fin de todo mal, (Sabiduría 14, 27)


“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina