Found 2830 Results for: Mis

  • "No, señor, escúchame bien: yo te doy el campo y también la caverna que hay en él. Te la doy en presencia de mis compatriotas, para que entierres a tu esposa". (Génesis 23, 11)

  • "El Señor, Dios del cielo, que me sacó de mi casa paterna y de mi país natal, y me prometió solemnemente dar esta tierra a mis descendientes, enviará su Ángel delante de ti, a fin de que puedas traer de allí una esposa para mi hijo. (Génesis 24, 7)

  • diciendo: "Bendito sea el Señor, Dios de mi patrón Abraham, que nunca dejó de manifestarle su amor y su fidelidad. Él ha guiado mis pasos hasta la casa de sus parientes". (Génesis 24, 27)

  • Ve, en cambio, a mi casa paterna, y busca entre mis familiares una esposa para mi hijo’. (Génesis 24, 38)

  • Para quedar libre del juramento que me haces, debes visitar primero a mis familiares. Si ellos no quieren dártela, el juramento ya no te obligará’. (Génesis 24, 41)

  • Por eso hoy, al llegar a la fuente, dije: ‘Señor, Dios de mi patrón Abraham, permíteme llevar a cabo la misión que he venido a realizar. (Génesis 24, 42)

  • Y ahora, si ustedes están dispuestos a ofrecer a mi patrón una auténtica prueba de amistad, díganmelo; si no, díganmelo también. Así yo sabré a qué atenerme". (Génesis 24, 49)

  • Ellos despidieron a Rebeca y a su nodriza, lo mismo que al servidor y a sus acompañantes, (Génesis 24, 59)

  • Mismá, Dumá, Masá, (Génesis 25, 14)

  • Haré esto en premio a la obediencia de Abraham, que observó mis órdenes y mis mandamientos, mis preceptos y mis instrucciones". (Génesis 26, 5)

  • En seguida abrió de nuevo los pozos que habían sido cavados en tiempos de su padre, y que los filisteos habían tapado después de la muerte de Abraham, y los llamó con los mismos nombres que les había dado su padre. (Génesis 26, 18)

  • y esa misma noche el Señor se le apareció para decirle: "Yo soy el Dios de Abraham, tu padre: no temas, porque estoy contigo. Yo te bendeciré y multiplicaré tu descendencia, por amor a mi servidor Abraham". (Génesis 26, 24)


“Enquanto tiver medo de ser infiel a Deus, você não será’. Deve-se ter medo quando o medo acaba!” São Padre Pio de Pietrelcina