32. Así fue concluida la construcción de la Morada, o sea, la Carpa del Encuentro. En la ejecución del trabajo, los israelitas obraron exactamente conforme a todo lo que el Señor había mandado a Moisés.





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina