I Reyes, 17
7. Al cabo de los días se secó el torrente, porque no había lluvia en el país.
7. Al cabo de los días se secó el torrente, porque no había lluvia en el país.
“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina