11. Rueguen por la vida de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y por la de su hijo Baltasar, para que sus días sean sobre la tierra como los días del cielo.





“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina