Gefunden 181 Ergebnisse für: montaña

  • En aquel tiempo, cuando no había rey en Israel, un levita que vivía en la montaña de Efraín tomó por concubina a una mujer de Belén de Judá. (Jueces 19, 1)

  • En esto llegó un anciano, que venía de trabajar del campo. Era un hombre de la montaña de Efraín, que vivía en Guibeá; las gentes del lugar eran benjaminitas. (Jueces 19, 16)

  • Él respondió: "Venimos de Belén de Judá y vamos a la montaña de Efraín. Yo soy de allí. Fui a Belén de Judá, y ahora vuelvo a mi casa; pero nadie quiere hospedarme en su casa. (Jueces 19, 18)

  • Había un hombre de Ramá, un sufita de la montaña de Efraín, que se llamaba Elcaná, hijo de Yeroján, hijo de Elihú, hijo de Toju, hijo de Suf, efraimita. (I Samuel 1, 1)

  • Saúl eligió tres mil hombres de Israel; dos mil estaban con él en Micmás y en la montaña de Betel, y mil con Jonatán en Guibeá de Benjamín; a los demás los mandó cada uno a su casa. (I Samuel 13, 2)

  • Y todos los israelitas que se habían escondido en la montaña de Efraín, al oír que los filisteos habían huido, se pusieron también a perseguirlos. (I Samuel 14, 22)

  • Por un lado estaban los filisteos en la montaña, y al lado opuesto estaban los de Israel; había un valle entre ellos. (I Samuel 17, 3)

  • David quedó en el desierto, en los lugares fuertes, en la montaña del desierto de Zif. Saúl le buscaba continuamente, pero Dios no le puso en sus manos. (I Samuel 23, 14)

  • Saúl y sus hombres iban por un lado de la montaña, y David y los suyos por el otro. David se daba prisa para escapar de Saúl, y Saúl y sus hombres intentaban pasar al lado de David y de sus hombres para apoderarse de ellos. (I Samuel 23, 26)

  • David pasó al extremo opuesto y se detuvo a lo lejos sobre la cumbre de la montaña; había entre ellos un gran trecho. (I Samuel 26, 13)

  • Entonces Absalón huyó. El centinela levantó la vista y vio que venía mucha gente por el camino de Bajurín, del lado de la montaña. (II Samuel 13, 34)

  • No es eso, sino que un hombre de la montaña de Efraín, llamado Sebá, hijo de Bicrí, ha levantado su mano contra el rey David. Entregádmelo a él solo, y yo me alejaré de la ciudad". La mujer le dijo: "Mira, te tiraremos su cabeza por encima de la muralla". (II Samuel 20, 21)


“Comunguemos com santo temor e com grande amor.” São Padre Pio de Pietrelcina