Gefunden 486 Ergebnisse für: sacerdote

  • Pero si la lepra se ha extendido por la piel hasta cubrir toda la piel del enfermo desde la cabeza hasta los pies, en cuanto alcanza a verlo el sacerdote, (Levítico 13, 12)

  • en cuanto el sacerdote vea la úlcera, lo declarará impuro. La úlcera es impura; es un caso de lepra. (Levítico 13, 15)

  • Pero si la úlcera cambia, volviéndose blanca, el afectado ha de presentarse al sacerdote. (Levítico 13, 16)

  • El sacerdote lo examinará, y al ver que la llaga se ha vuelto blanca, declarará puro al afectado por la enfermedad: es puro. (Levítico 13, 17)

  • y en el lugar del divieso aparece un tumor blanco, o una mancha de color blanco rojizo, ése habrá de presentarse al sacerdote. (Levítico 13, 19)

  • El sacerdote lo examinará, y si la mancha parece más hundida que la piel y su pelo se ha vuelto blanco, el sacerdote lo declarará impuro. Es llaga de lepra que se ha producido en el divieso. (Levítico 13, 20)

  • Pero si el sacerdote ve que no hay en ella pelo blanco, ni está más hundida que la piel, y que ha perdido color, le recluirá por siete días. (Levítico 13, 21)

  • Si entonces se extiende por la piel, el sacerdote lo declarará impuro; es un caso de lepra. (Levítico 13, 22)

  • Pero si la mancha sigue estacionaria, sin extenderse, es la cicatriz del divieso; el sacerdote lo declarará puro. (Levítico 13, 23)

  • el sacerdote la examinará; y si el pelo se ha vuelto blanco en la mancha blanca y ésta aparece más hundida que la piel, es que se ha producido lepra en la quemadura. El sacerdote lo declarará impuro; es un caso de lepra. (Levítico 13, 25)

  • Si, en cambio, el sacerdote observa que en la mancha no aparece pelo blanco, que no está más hundida que la piel y que ha perdido color, lo recluirá siete días. (Levítico 13, 26)

  • Al séptimo día lo examinará, y si se ha extendido por la piel, el sacerdote lo declarará impuro; es un caso de lepra. (Levítico 13, 27)


“Todas as pessoas que escolhem a melhor parte (viver em Cristo) devem passar pelas dores de Cristo; algumas mais, algumas menos…” São Padre Pio de Pietrelcina