9. Le contestó: «Tráeme una ternera, una cabra y un carnero, todos ellos de tres años, y también una paloma y un pichón.»





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina