Encontrados 37 resultados para: suya

  • Quien derrame sangre de hombre verá la suya derramada por el hombre, porque Dios ha hecho al hombre a su imagen. (Génesis 9, 6)

  • "Escúchanos, señor; tú eres entre nosotros un príncipe de Dios; sepulta a tu difunta en la mejor de nuestras tumbas. Ninguno te negará la suya para que puedas enterrar a tu difunta". (Génesis 23, 6)

  • Tú le hablarás a él y pondrás las palabras en su boca; yo estaré en tu boca y en la suya y os enseñaré lo que habéis de hacer. (Exodo 4, 15)

  • Pero si sobreviviere un día o dos, no, porque es propiedad suya. (Exodo 21, 21)

  • Cuando la casa de un levita no es rescatada, si ha sido vendida en una de las ciudades de su propiedad, saldrá libre en el jubileo porque las casas de las ciudades levíticas son propiedad suya en medio de los israelitas. (Levítico 25, 33)

  • Igualmente los campos anejos a sus ciudades no podrán ser vendidos, porque son propiedad suya a perpetuidad. (Levítico 25, 34)

  • pero si la nube permanecía pocos días sobre la tienda, entonces acampaban por orden del Señor y por orden suya levantaban el campamento. (Números 9, 20)

  • No volveremos a nuestras tierras hasta que los israelitas hayan tomado posesión de la heredad, cada uno de la suya. (Números 32, 18)

  • pues la tribu de los hijos de Rubén y la tribu de los hijos de Gad con sus casas patriarcales han recibido ya su herencia. Media tribu de Manasés ha recibido también la suya. (Números 34, 14)

  • y comerá una porción igual a la suya, aparte de su patrimonio personal. (Deuteronomio 18, 8)

  • Intervendrán después los sacerdotes levitas, ya que a ellos los eligió el Señor, tu Dios, para que le sirvan y bendigan en su nombre, y suya es también la decisión en caso de litigios y lesiones. (Deuteronomio 21, 5)

  • y vosotros os habéis levantado hoy contra la casa de mi padre, habéis matado a sus hijos, setenta hombres, sobre la misma piedra, y habéis puesto por rey sobre los nobles de Siquén a Abimelec, el hijo de una esclava suya, porque es vuestro hermano; (Jueces 9, 18)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina