Encontrados 154 resultados para: suerte

  • Llegaron luego los dos hombres perversos y, encarándosele, testificaron ante la asamblea de esta suerte: "Nabot ha maldecido a Dios y al rey". Entonces lo sacaron fuera de la ciudad y lo mataron a pedradas. (I Reyes 21, 13)

  • Pero Jehú había echado ya mano a su arco e hirió a Jorán por la espalda, de suerte que la saeta le salió por el corazón, y cayó desplomado en su carro. (II Reyes 9, 24)

  • (39 )Éstas fueron sus ciudades con su demarcación: A los hijos de Aarón, del clan quehatita, les tocó en suerte (I Crónicas 6, 54)

  • (46 )A los otros hijos de Quehat les tocaron en suerte diez ciudades de la tribu de Efraín, de la de Dan y de la media tribu de Manasés. (I Crónicas 6, 61)

  • (51 )A otros hijos de Quehat les tocaron en suerte ciudades de la tribu de Efraín; (I Crónicas 6, 66)

  • La distribución se hizo por suerte entre unos y otros, pues tanto los descendientes de Eleazar como los de Itamar tenían funcionarios sagrados y funcionarios de Dios. (I Crónicas 24, 5)

  • Semayas, hijo de Natanael, un escriba levita, los registró en presencia del rey, de los jefes, del sacerdote Sadoc, de Ajimélec, hijo de Abiatar, y de los jefes de familias de sacerdotes y levitas: se sacaban alternativamente por suerte dos familias de los hijos de Eleazar y una familia de los hijos de Itamar. (I Crónicas 24, 6)

  • La primera suerte cayó sobre Yehoyarib, la segunda sobre Yedayas, (I Crónicas 24, 7)

  • También éstos, lo mismo que los hijos de Aarón, fueron clasificados por suerte en presencia del rey David, de Sadoc, de Ajimélec y de los jefes de familias sacerdotales y levíticas, sin distinción de ninguna clase. (I Crónicas 24, 31)

  • El primero en suerte fue José, descendiente de Asaf; el segundo, Godolías; él, sus hermanos e hijos: doce en total; (I Crónicas 25, 9)

  • hijo de una mujer danita, pero de padre tirio. Sabe trabajar el oro, la plata, el bronce, el hierro, la piedra, la madera, la escarlata, el jacinto, el lino, el carmesí, y grabar toda suerte de diseños y figuras. Trabajará con tus obreros y con los de tu padre David, mi señor. (II Crónicas 2, 13)

  • Las naciones y las ciudades se destruirán unas a otras, porque Dios las llenará de terror con toda suerte de calamidades. (II Crónicas 15, 6)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina