Encontrados 67 resultados para: carneros

  • dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año, para el sacrificio de reconciliación. Ésta fue la ofrenda de Elisamá, hijo de Amihud. (Números 7, 53)

  • dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año, para el sacrificio de reconciliación. Ésta fue la ofrenda de Gamaliel, hijo de Pedasur. (Números 7, 59)

  • dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año, para el sacrificio de reconciliación. Ésta fue la ofrenda de Abidán, hijo de Gedeoní. (Números 7, 65)

  • dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año, para el sacrificio de reconciliación. Ésta fue la ofrenda de Ajiezer, hijo de Amisaday. (Números 7, 71)

  • dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año, para el sacrificio de reconciliación. Ésta fue la ofrenda de Pagiel, hijo de Ocrán. (Números 7, 77)

  • dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabríos, cinco corderos de un año, para el sacrificio de reconciliación. Ésta fue la ofrenda de Ajirá, hijo de Enán. (Números 7, 83)

  • Total de los animales para el holocausto: doce novillos, doce carneros, doce corderos de un año, con sus ofrendas; doce machos cabríos, para el sacrificio por el pecado; (Números 7, 87)

  • total de animales para el sacrificio de reconciliación: veinticuatro bueyes, sesenta carneros, sesenta machos cabríos y sesenta corderos de un año. Éstas fueron las ofrendas para la consagración del altar cuando fue ungido. (Números 7, 88)

  • Balaán dijo a Balac: "Levántame aquí siete altares y prepárame siete novillos y siete carneros". (Números 23, 1)

  • Balaán dijo a Balac: "Levántame aquí siete altares y prepárame aquí siete novillos y siete carneros". (Números 23, 29)

  • El segundo día ofreceréis doce novillos, dos carneros y catorce corderos de un año, sin defecto, (Números 29, 17)

  • con las ofrendas correspondientes de pan y de vino, según el número de novillos, carneros y corderos; (Números 29, 18)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina