Encontrados 37 resultados para: trata

  • y enviaron la túnica de manga larga, haciéndola llegar hasta su padre con este recado: «Esto hemos encontrado: examina si se trata de la túnica de tu hijo, o no.» (Génesis 37, 32)

  • Tomáis también con vosotros el doble de plata y devolvéis personalmente la plata devuelta en la boca de vuestras talegas, por si se trata de un error. (Génesis 43, 12)

  • ¡Se trata nada menos que de lo que utiliza mi señor para beber, y también para sus adivinaciones! ¡Qué mal habéis obrado!» (Génesis 44, 5)

  • Toma después el sebo de este carnero: la cola, el sebo que cubre las entrañas, el que queda junto al hígado, los dos riñones con el sebo que lo envuelve y la pierna derecha, porque se trata del carnero de la investidura. (Exodo 29, 22)

  • Pasados estos siete días, el sacerdote lo examinará nuevamente: si ve que la llaga ha perdido su color y no se ha extendido en la piel, el sacerdote lo declarará puro; no se trata más que de una erupción. Lavará sus vestidos y quedará puro. (Levítico 13, 6)

  • se trata de lepra arraigada en su piel; el sacerdote lo declarará impuro y no le recluirá, porque es impuro. (Levítico 13, 11)

  • Pero si la mancha sigue estacionaria sin extenderse por la piel y ha perdido color, se trata de la hinchazón de la quemadura, y el sacerdote lo declarará puro; pues es la cicatriz de la quemadura. (Levítico 13, 28)

  • el sacerdote las examinará; si comprueba que las manchas de la piel son de color blanco, se trata de un eccema que ha brotado en la piel; esta persona es pura. (Levítico 13, 39)

  • se trata de un leproso: es impuro. El sacerdote le declarará impuro; tiene lepra en la cabeza. (Levítico 13, 44)

  • y los dejaréis en herencia a vuestros hijos después de vosotros como propiedad perpetua. A éstos los podréis tener como siervos; pero si se trata de vuestros hermanos, los israelitas, tú, como entre hermanos, no le mandarás con tiranía. (Levítico 25, 46)

  • si se trata de un varón de veinte a sesenta años, el valor se estimará en cincuenta siclos de plata, en siclos del santuario. (Levítico 27, 3)

  • Mas si se trata de una mujer, el valor será de treinta siclos. (Levítico 27, 4)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina