Encontrados 159 resultados para: servicio

  • El rey y Yehoyadá se lo daban a los encargados de las obras del servicio de la Casa de Yahveh, y éstos tomaban a sueldo canteros y carpinteros para restaurar la Casa de Yahveh, y también a los que trabajaban en hierro y bronce, para reparar la Casa de Yahveh. (II Crónicas 24, 12)

  • Ezequías restableció las clases de los sacerdotes y de los levitas, cada uno en su sección, según su servicio, ya fuera sacerdote, ya levita, ya se tratara de holocaustos y sacrificios de comunión, ya de servicio litúrgico, acción de gracias o himnos, en las puertas del campamento de Yahveh. (II Crónicas 31, 2)

  • Todas las obras que emprendió en servicio de la Casa de Dios, la Ley y los mandamientos, las hizo buscando a su Dios con todo su corazón y tuvo éxito. (II Crónicas 31, 21)

  • Restableció a los sacerdotes en sus ministerios y los animó al servicio de la Casa de Yahveh. (II Crónicas 35, 2)

  • Preparado así el servicio, ocuparon los sacerdotes sus puestos, lo mismo que los levitas, según sus clases, conforme al mandato del rey. (II Crónicas 35, 10)

  • También los cantores, hijos de Asaf, estaban en su puesto, conforme a lo dispuesto por David, Asaf, Hemán y Yedutún, vidente del rey; lo mismo los porteros, cada uno en su puerta. No tenían necesidad de retirarse de su servicio, porque sus hermanos, los levitas, se lo preparaban todo. (II Crónicas 35, 15)

  • De esta manera se organizó aquel día todo el servicio de Yahveh para celebrar la Pascua y ofrecer los holocaustos sobre el altar de Yahveh, según la orden del rey Josías. (II Crónicas 35, 16)

  • Luego establecieron a los sacerdotes según sus categorías, y a los levitas según sus clases, para el servicio de la Casa de Dios en Jerusalén, según está escrito en el libro de Moisés. (Esdras 6, 18)

  • Los utensilios que se te entregan para el servicio de la Casa de tu Dios, deposítalos delante de tu Dios en Jerusalén. (Esdras 7, 19)

  • Y de los donados que David y los jefes habían destinado al servicio de los levitas: 220 donados. Todos ellos fueron designados nominalmente. (Esdras 8, 20)

  • Junto a él repararon los de Técoa, pero sus notables se negaron a poner su cuello al servicio de sus señores. (Nehemías 3, 5)

  • Nos imponemos como obligación: Dar un tercio de siclo al año para el servicio de la Casa de nuestro Dios: (Nehemías 10, 33)


“O verdadeiro servo de Deus é aquele que usa a caridade para com seu próximo, que está decidido a fazer a vontade de Deus a todo custo, que vive em profunda humildade e simplicidade”. São Padre Pio de Pietrelcina