Encontrados 28 resultados para: miro

  • También Abel hizo una oblación de los primogénitos de su rebaño, y de la grasa de los mismos. Yahveh miró propicio a Abel y su oblacíon, (Génesis 4, 4)

  • mas no miró propicio a Caín y su oblación, por lo cual se irritó Caín en gran manera y se abatió su rostro. (Génesis 4, 5)

  • Dios miró a la tierra, y he aquí que estaba viciada, porque toda carne tenía una conducta viciosa sobre la tierra. (Génesis 6, 12)

  • El año 601 de la vida de Noé, el día primero del primer mes, se secaron las aguas de encima de la tierra. Noé retiró la cubierta del arca, miró y he aquí que estaba seca la superficie del suelo. (Génesis 8, 13)

  • Su mujer miró hacia atrás y se volvió poste de sal. (Génesis 19, 26)

  • Dirigió la vista en direción de Sodoma y Gomorra y de toda la región de la redonda, miró, y he aquí que subía una humareda de la tierra cual la de una fogata. (Génesis 19, 28)

  • Levantó Abraham los ojos, miró y vio un carnero trabado en un zarzal por los cuernos. Fue Abraham, tomó el carnero, y lo sacrificó en holocausto en lugar de su hijo. (Génesis 22, 13)

  • Miró a uno y a otro lado, y no viendo a nadie, mató al egipcio y lo escondió en la arena. (Exodo 2, 12)

  • Y miró Dios a los hijos de Israel y conoció... (Exodo 2, 25)

  • Llegada la vigilia matutina, miró Yahveh desde la columna de fuego y humo hacia el ejército de los egipcios, y sembró la confusión en el ejército egipcio. (Exodo 14, 24)

  • Miró Arauná y vio al rey y a sus servidores que venían hacia él. Entonces Arauná salió y se postró rostro en tierra ante el rey. (II Samuel 24, 20)

  • Dijo a su criado : «Sube y mira hacia el mar.» Subió, miró y dijo: «No hay nada.» El dijo: «Vuelve.» Y esto siete veces. (I Reyes 18, 43)


“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina