Encontrados 209 resultados para: jefe

  • Se levantó David y llegó al lugar donde acampaba Saúl. Observó el sitio en que estaban acostados Saúl y Abner, hijo de Ner, jefe de su tropa. Dormía Saúl en el círculo del campamento, estando la tropa acampada en derredor de él. (I Samuel 26, 5)

  • Abner, hijo de Ner, jefe del ejército de Saúl, tomó a Isbaal, hijo de Saúl, y le hizo pasar a Majanáyim. (II Samuel 2, 8)

  • Joab, hijo de Sarvia, era jefe del ejército, y Josafat, hijo de Ajilub, era el heraldo. (II Samuel 8, 16)

  • Hadadézer mandó venir a los arameos del otro lado del Río. Y llegaron a Jelam, viniendo a su cabeza Sobak, jefe del ejército de Hadadézer. (II Samuel 10, 16)

  • Huyeron los arameos ante Israel y David abatió a los arameos setecientos carros y 40.000 de carro. Hirió también a Sobak, jefe de su ejército, que murió allí mismo. (II Samuel 10, 18)

  • Decid también a Amasá: "¿No eres tú hueso mío y carne mía? Esto me haga Dios y esto me añada si no entras a mi servicio toda mi vida como jefe del ejército, en lugar de Joab."» (II Samuel 19, 14)

  • Joab era jefe de todo el ejército. Benaías, hijo de Yehoyadá, era jefe de los kereteos y los peleteos. (II Samuel 20, 23)

  • Adoram era jefe de la leva, y Josafat, hijo de Ajilud, era el heraldo. (II Samuel 20, 24)

  • Abisay, hermano de Joab, e hijo de Sarvia, era jefe de los Treinta; fue el que blandió su lanza contra trescientos hombres y conquistó renombre entre los Treinta. (II Samuel 23, 18)

  • Fue más ilustre que los Treinta pero no igualó a los Tres. David le hizo jefe de su guardia personal. (II Samuel 23, 23)

  • Ha sacrificado bueyes, vacas cebadas y ovejas en abundancia, invitando a todos los hijos del rey, al sacerdote Abiatar y a Joab, jefe del ejército, pero no ha invitado a tu siervo Salomón. (I Reyes 1, 19)

  • Yahveh hará recaer su sangre sobre su cabeza porque ha matado dos hombres más justos y mejores que él, matándolos a espada sin saberlo mi padre, a Abner, hijo de Ner, jefe del ejército de Israel, y a Amasá, hijo de Yéter, jefe del ejército de Judá. (I Reyes 2, 32)


“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina