Encontrados 70 resultados para: encontró

  • El hombre puso nombres a todos los ganados, a las aves del cielo y a todos los animales del campo, mas para el hombre no encontró una ayuda adecuada. (Génesis 2, 20)

  • La encontró el Angel de Yahveh junto a una fuente de agua en el desierto - la fuente que hay en el camino de Sur - (Génesis 16, 7)

  • En efecto, en cuanto vio el anillo y los brazaletes en los brazos de su hermana, y oyó decir a su hermana Rebeca: «Así me ha hablado aquel hombre», se llegó a donde él. Le encontró todavía junto a los camellos cerca de la fuente, (Génesis 24, 30)

  • Una vez fue Rubén, al tiempo de la siega del trigo, y encontró en el campo unas mandrágoras que trajo a su madre Lía. Y dijo Raquel a Lía "«¿Quieres darme las mandrágoras de tu hijo?» (Génesis 30, 14)

  • Los hijos de Sibeón: Ayyá y Aná. Este es el mismo Aná que encontró las aguas termales en el desierto, cuando apacentaba los asnos de su padre Sibeón. (Génesis 36, 24)

  • El hombre le dijo: «Partieron de aquí, pues yo les oí decir: "Vamos a Dotán."» José fue detrás de sus hermanos y los encontró en Dotán. (Génesis 37, 17)

  • Judá, por su parte, envió el cabrito por mediación de su compañero el adulamita, para rescatar la prenda de manos de la mujer, pero éste no la encontró. (Génesis 38, 20)

  • José vino a ellos por la mañana, y los encontró preocupados. (Génesis 40, 6)

  • Dijo Yahveh a Aarón: «Vete al desierto al encuentro de Moisés.» Partió, pues, y le encontró en el monte de Dios y le besó. (Exodo 4, 27)

  • Toda la comunidad de los israelitas partió del desierto de Sin, a la orden de Yahveh, para continuar sus jornadas; y acamparon en Refidim, donde el pueblo no encontró agua para beber. (Exodo 17, 1)

  • Cuando los israelitas estaban en el desierto, se encontró a un hombre que andaba buscando leña en día de sábado. (Números 15, 32)

  • Volvió donde él y lo encontró aún de pie junto a sus holocaustos, con los príncipes de Moab. Le dijo Balaq: «¿Qué ha dicho Yahveh?» (Números 23, 17)


“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina