Encontrados 8 resultados para: Hedor

  • mis llagas son hedor y putridez, debido a mi locura; (Salmos 38, 6)

  • hasta el punto que de los ojos del impío pululaban gusanos, caían a pedazos sus carnes, aun estando con vida, entre dolores y sufrimientos, y su infecto hedor apestaba todo el ejército. (II Macabeos 9, 9)

  • Al que poco antes creía tocar los astros del cielo, nadie podía ahora llevarlo por la insoportable repugnancia del hedor. (II Macabeos 9, 10)

  • Como ni él mismo podía soportar su propio hedor, decía: «Justo es estar sumiso a Dios y que un mortal no pretenda igualarse a la divinidad.» (II Macabeos 9, 12)

  • Por debajo del bálsamo habrá hedor, por debajo de la faja, soga, por debajo de la peluca, rapadura, y por debajo del traje, refajo de arpillera. y por debajo de la hermosura, vergüenza. (Isaías 3, 24)

  • Sus heridos yacen tirados, de sus cadáveres sube el hedor, y sus montes chorrean sangre; (Isaías 34, 3)

  • Al que viene del Norte le alejaré de vosotros, y le echaré hacia una tierra de aridez y desolación: su vanguardia hacia el mar oriental, hacia el mar occidental su retaguardia. Y subirá su hedor, y subirá su fetidez». (¡Porque él hace grandezas!) (Joel 2, 20)

  • He enviado contra vosotros peste, como la peste de Egipto, he matado a espada a vuestros jóvenes, mientras vuestros caballos eran capturados; he hecho subir a vuestras narices el hedor de vuestros campamentos, ¡y no habéis vuelto a mí!, oráculo de Yahveh. (Amós 4, 10)


“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina