Encontrados 221 resultados para: temor

  • Por la mañana dirás: "¡Ojalá fuera de tarde!", y por la tarde: "¡Ojalá fuera de mañana!", a causa del temor que sentirás y de lo que verán tus ojos. (Deuteronomio 28, 67)

  • Jericó estaba herméticamente cerrada por temor a los israelitas: nadie salía ni entraba. (Josué 6, 1)

  • Esto le produjo un gran temor, porque Gabaón era tan importante como una ciudad real y más grande aún que Ai. Además, todos sus habitantes eran aguerridos. (Josué 10, 2)

  • En realidad, lo hicimos por temor, pensando que el día de mañana los hijos de ustedes podrían decir a los nuestros: ‘¿Qué tienen que ver ustedes con el Señor, el Dios de Israel? (Josué 22, 24)

  • ¡Rubenitas y gaditas! El Señor ha puesto un límite entre nosotros y ustedes: el Jordán. Por lo tanto, ustedes no tienen parte con el Señor’. Y de esa manera, sus hijos apartarían a los nuestros del temor del Señor. (Josué 22, 25)

  • Gedeón reunió a diez de sus servidores e hizo lo que el Señor le había dicho. Pero por temor a su familia y a la gente de la ciudad, en lugar de hacerlo de día, lo hizo durante la noche. (Jueces 6, 27)

  • los filisteos sintieron temor, porque decían: "Un dios ha llegado al campamento". Y exclamaron: "¡Ay de nosotros, porque nada de esto había sucedido antes! (I Samuel 4, 7)

  • Samuel invocó al Señor, y aquel día el Señor envió truenos y lluvia. Todo el pueblo sintió un gran temor del Señor y de Samuel. (I Samuel 12, 18)

  • Al entrar en el bosque, vieron que allí corría la miel, pero nadie se atrevió a probarla por temor al juramento. (I Samuel 14, 26)

  • Saúl y todo Israel, al oír estas palabras del filisteo, quedaron espantados y sintieron un gran temor. (I Samuel 17, 11)

  • ha hablado el Dios de Jacob, la Roca de Israel me ha dicho: El que gobierna a los hombres con justicia, el que gobierna con temor de Dios (II Samuel 23, 3)

  • Así los israelitas sentirán temor de ti mientras vivan en el suelo que diste a sus padres. (I Reyes 8, 40)


“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina