Encontrados 29 resultados para: podido

  • yo soy indigno de las gracias con que has favorecido constantemente a tu servidor. Porque cuando crucé el Jordán, no tenía nada más que mi bastón, y ahora he podido formar dos campamentos. (Génesis 32, 11)

  • todo el ejército regresó sano y salvo al campamento de Josué, en Maquedá. Nadie había podido causar el menor daño a los israelitas. (Josué 10, 21)

  • El Señor desposeyó delante de ustedes a naciones numerosas y fuertes; y hasta el presente, nadie ha podido resistirles. (Josué 23, 9)

  • Y si sus padres o hermanos vienen a protestar contra nosotros, les diremos: ‘Sean condescendientes con ellos, ya que no hemos podido capturar en la guerra una mujer para cada uno. Además, ustedes no hubieran podido dárselas, porque en ese caso se habrían hecho culpables’". (Jueces 21, 22)

  • -es decir, a sus descendientes, que habían quedado después de ellos en el país, porque los israelitas no habían podido consagrarlos al exterminio total- Salomón les impuso trabajos forzados hasta el día de hoy. (I Reyes 9, 21)

  • Ellos sintieron mucho miedo y dijeron: "Dos reyes no han podido resistir delante de él, ¿cómo podremos resistir nosotros?". (II Reyes 10, 4)

  • Pero David no había podido presentarse allí para consultar a Dios, porque la espada del Ángel del Señor lo había llenado de terror. (I Crónicas 21, 30)

  • Cuando los hombres de Judá llegaron a la cima que domina el desierto y volvieron sus ojos hacia la multitud, no vieron más que cadáveres tendidos por tierra, porque ninguno había podido escapar. (II Crónicas 20, 24)

  • Entonces la ira del Señor se encendió contra Amasías y le envió un profeta para decirle: "¿Por qué has buscado a los dioses de esa gente, que no han podido salvar a su pueblo de tus manos?". (II Crónicas 25, 15)

  • ya que no habían podido celebrarla a su debido tiempo, porque los sacerdotes no se habían purificado en número suficiente y el pueblo no se había reunido en Jerusalén. (II Crónicas 30, 3)

  • Senaquerib escribió una carta para ultrajar al Señor, el Dios de Israel, y desafiarlo en estos términos: "Así como en los otros países los dioses de las naciones no han podido librar a sus pueblos, tampoco podrá el dios de Ezequías librar a su pueblo de mis manos". (II Crónicas 32, 17)

  • Los extranjeros que habían podido escapar se fueron a anunciar a Lisias todo lo que había sucedido. (I Macabeos 4, 26)


“Tente percorrer com toda a simplicidade o caminho de Nosso Senhor e não se aflija inutilmente.” São Padre Pio de Pietrelcina