Encontrados 218 resultados para: ofrenda

  • Juntamente con él, presentarán -como ofrenda que se quema con aroma agradable al Señor- una oblación consistente en dos décimas de harina de la mejor calidad mezclada con aceite; y añadirán como libación un litro y medio de vino. (Levítico 23, 13)

  • Antes de ese día, o sea, antes de entregar la ofrenda de su Dios, no comerán pan, grano tostado ni espigas tiernas. Este es un decreto válido para siempre, a lo largo de las generaciones, cualquiera sea el lugar donde habiten. (Levítico 23, 14)

  • Por eso tendrán que contar hasta el día siguiente al séptimo sábado: cincuenta días en total. Entonces ofrecerán al Señor una ofrenda de grano nuevo. (Levítico 23, 16)

  • Junto con el pan, ofrecerán en holocausto al Señor siete corderos de un año y sin defecto, un novillo y dos carneros, con sus correspondientes oblaciones y libaciones, como ofrenda que se quema con aroma agradable al Señor. (Levítico 23, 18)

  • No harán ningún trabajo servil y presentarán una ofrenda que se quema en homenaje al Señor. (Levítico 23, 25)

  • Además, el décimo día de ese séptimo mes, será el día de la Expiación. Habrá una asamblea litúrgica, observarán el ayuno y presentarán una ofrenda que se quema para el Señor. (Levítico 23, 27)

  • Durante siete días presentarán una ofrenda que se quema para el Señor. Al octavo día, celebrarán una asamblea litúrgica y presentarán una ofrenda que se quema para el Señor: es una asamblea solemne y ustedes no harán ningún trabajo. (Levítico 23, 36)

  • y sobre cada hilera pondrás incienso puro, como un memorial del pan, como una ofrenda que se quema para el Señor. (Levítico 24, 7)

  • Si alguien entrega un animal de los que pueden ser presentados al Señor como ofrenda, el animal ofrecido será una cosa sagrada. (Levítico 27, 9)

  • Si se trata de un animal impuro, que no puede ser presentado como ofrenda al Señor, será presentado ante el sacerdote, (Levítico 27, 11)

  • deberá computar el importe de su valor hasta el año del jubileo, y la persona pagará ese mismo día la suma en que ha sido tasado, como una ofrenda consagrada al Señor. (Levítico 27, 23)

  • En seguida extenderán una tela de púrpura violeta sobre la mesa de los panes de la ofrenda, y depositarán sobre ella las fuentes, los vasos, las tazas y los jarros para la libación. El pan de la ofrenda perpetua estará sobre la mesa. (Números 4, 7)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina