Encontrados 22 resultados para: morirás
Pero ahora, devuélvele la mujer a ese hombre. Él es un profeta, y va a interceder en tu favor, para que salves tu vida. Si no se la devuelves, ten la plena seguridad de que morirás, tú y todos los tuyos". (Génesis 20, 7)
El Faraón dijo a Moisés: "¡Fuera de aquí! Y no te atrevas a comparecer otra vez en mi presencia, porque apenas lo hagas, morirás". (Exodo 10, 28)
Tú morirás en la montaña a la que vas a subir e irás a reunirte con los tuyos, como tu hermano Aarón murió en el monte Hor y fue a reunirse con los suyos. (Deuteronomio 32, 50)
Pero el Señor le respondió: "Quédate en paz. No temas, no morirás". (Jueces 6, 23)
Jonatán le respondió: "¡Ni pensarlo! ¡Tú no morirás! Mira, mi padre no hace absolutamente nada sin comunicármelo. ¿Por qué entonces me habría de ocultar este asunto? ¡No hay nada de eso!". (I Samuel 20, 2)
Pero el rey replicó: "¡Morirás sin remedio, Ajimélec, tú y toda tu casa paterna!". (I Samuel 22, 16)
David dijo a Natán: "¡He pecado contra el Señor!". Natán le respondió: "El Señor, por su parte, ha borrado tu pecado: no morirás. (II Samuel 12, 13)
Luego el rey dijo a Simei: "Tú no morirás". Y se lo juró. (II Samuel 19, 24)
Porque si un día sales y cruzas el torrente Cedrón, sábelo bien: morirás irremediablemente; tu sangre recaerá sobre tu cabeza". (I Reyes 2, 37)
Por eso, así habla el Señor: No te levantarás del lecho en el que te has acostado, porque morirás irremediablemente". Y Elías se fue. (II Reyes 1, 4)
Ellos le dijeron: "Un hombre nos salió al encuentro y nos dijo: Vuelvan a ver al rey que los ha enviado y díganle: Así habla el Señor: ¿Acaso no hay Dios en Israel, para que tú mandes a consultar a Baal Zebub, el dios de Ecrón? Por eso, no te levantarás del lecho en el que te has acostado, porque morirás irremediablemente". (II Reyes 1, 6)
y le dijo: "Así habla el Señor: Por haber enviado mensajeros a consultar a Baal Zebub, el dios de Ecrón, como si no hubiera Dios en Israel para consultar su palabra, por eso, no te levantarás del lecho donde te has acostado: morirás irremediablemente". (II Reyes 1, 16)
