Encontrados 22 resultados para: inmensa

  • Por amor a tu servidor y conforme a tu designio, Señor, tú has realizado toda esta gran obra, dando así a conocer tu inmensa grandeza. (I Crónicas 17, 19)

  • En aquella ocasión, Salomón, y con él todo Israel, celebró la Fiesta durante siete días. Se congregó una asamblea inmensa, venida desde la Entrada de Jamat hasta el Torrente de Egipto. (II Crónicas 7, 8)

  • Entonces Asá invocó al Señor, su Dios, diciendo: "¡Tú solo, Señor, puedes ayudar al débil contra el fuerte! ¡Ayúdanos, Señor, Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos y en tu Nombre marchamos contra esta inmensa muchedumbre! ¡Señor, tú eres nuestro Dios! ¡Que ningún mortal prevalezca contra ti!". (II Crónicas 14, 10)

  • Y aquel mismo día, todos sus guerreros levantaron el campamento. Su ejército se componía de ciento setenta mil soldados de infantería, y de doce mil jinetes, sin contar los encargados del equipaje y los hombres de a pie que los acompañaban: era un inmensa multitud. (Judit 7, 2)

  • Pero yo, por tu inmensa bondad, llegaré hasta tu Casa, y me postraré ante tu santo Templo con profundo temor. (Salmos 5, 8)

  • divulgan el recuerdo de tu inmensa bondad y cantan alegres por tu victoria. (Salmos 145, 7)

  • Alábenlo por sus grandes proezas, alábenlo por su inmensa grandeza, (Salmos 150, 2)

  • Recuerden las obras que realizaron nuestros padres en su tiempo: así alcanzarán una inmensa gloria y una fama imperecedera. (I Macabeos 2, 51)

  • En todo el pueblo reinó una inmensa alegría, y así quedó borrado el ultraje infligido por los paganos. (I Macabeos 4, 58)

  • Judas reunió a todos los israelitas de la región de Galaad, del más pequeño al más grande, con sus mujeres, sus hijos y sus equipajes, para llevarlos al país de Judá: era una inmensa muchedumbre. (I Macabeos 5, 45)

  • Cuando el Macabeo reunió a sus seguidores, unos seis mil en total, los exhortó a que no se dejaran acobardar por los enemigos ni se amedrentaran ante la inmensa multitud de gente que venía a atacarlos injustamente. Los animó asimismo a que lucharan con entusiasmo, (II Macabeos 8, 16)

  • No digas: "Me ocultaré del Señor, y allá en lo alto, ¿quién se acordará de mí? Entre tanta gente pasaré inadvertido: ¿quién soy yo en la inmensa creación?". (Eclesiástico 16, 17)


“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina