Encontrados 56 resultados para: incluso

  • Así continuaron subiendo cada vez más, hasta que en todas partes quedaron sumergidas las montañas, incluso las más elevadas. (Génesis 7, 19)

  • El Señor le respondió: "¡Ahora verás lo que haré al Faraón! Tendrá que dejarlos partir por la fuerza, e incluso, se verá obligado a expulsarlos de su país". (Exodo 6, 1)

  • Luego el Señor dijo a Moisés: "Da esta orden a Aarón: ‘Toma tu bastón y extiende tu mano sobre las aguas de Egipto -sobre sus ríos y sus canales, sus pantanos y todos sus depósitos de agua- y que estas se conviertan en sangre a lo largo de todo Egipto, incluso las que están en recipientes de madera y de piedra’". (Exodo 7, 19)

  • Y llegarán incluso a trepar sobre ti, sobre tus servidores y sobre tu pueblo’". (Exodo 7, 29)

  • Incluso los sacerdotes que se acerquen al Señor deberán purificarse, para que el Señor no les quite la vida". (Exodo 19, 22)

  • Durante seis días trabajarás, pero el séptimo día deberás descansar, incluso en tiempo de siembra y de cosecha. (Exodo 34, 21)

  • Después la vaca será quemada a la vista de él: se deberá quemar el cuero, la carne, la sangre, e incluso los excrementos. (Números 19, 5)

  • Más aún, él hará cundir el pánico en medio de ellos, hasta que todos queden exterminados, incluso los sobrevivientes y los que intenten permanecer ocultos. (Deuteronomio 7, 20)

  • No obres de esa manera con el Señor, tu Dios. Porque él considera abominable y detesta todo lo que ellas hacen para honrar a sus dioses, ya que llegan incluso a quemar a sus hijos y a sus hijas en homenaje a esos dioses. (Deuteronomio 12, 31)

  • Rut dijo a su suegra: "Incluso me permitió quedarme con sus servidores hasta que termine la cosecha". (Rut 2, 21)

  • Incluso antes que se quemara la grasa, venía el servidor del sacerdote y decía a la persona que ofrecía el sacrificio: "Dale al sacerdote carne para asar; él no aceptará de ti carne cocida, sino sólo cruda". (I Samuel 2, 15)

  • Pero los hombres de Israel replicaron a los de Judá: "Nosotros tenemos sobre el rey, incluso sobre David, diez veces más derechos que ustedes. ¿Por qué nos han relegado? ¿No fuimos nosotros los primeros en proponer que volviera nuestro rey?". A esto respondieron los hombres de Judá con palabras aún más duras. (II Samuel 19, 44)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina