Encontrados 111 resultados para: amigo

  • ¡Pero eres tú, un hombre de mi condición, mi amigo y confidente, (Salmos 55, 14)

  • Soy amigo de todos tus fieles, de los que cumplen tus leyes. (Salmos 119, 63)

  • Que el justo me golpee como amigo y me corrija, pero que el óleo del malvado no perfume mi cabeza: yo seguiré oponiendo mi oración a sus maldades. (Salmos 141, 5)

  • Entonces exclamó: "¿Podremos hallar otro hombre como este? ¡Hagámoslo ahora mismo nuestro amigo y nuestro aliado!". (I Macabeos 10, 16)

  • Por eso te nombramos hoy Sumo Sacerdote de tu nación y te concedemos el titulo de Amigo del rey para que apoyes nuestra causa y nos asegures tu amistad". Al mismo tiempo, le enviaba una capa de púrpura y una corona de oro. (I Macabeos 10, 20)

  • Por sus buenos sentimientos hacia nosotros, hemos decidido favorecer al Pueblo judío, que es Amigo nuestro y respeta nuestros derechos. (I Macabeos 11, 33)

  • "El rey Demetrio saluda a Simón, Sumo Sacerdote y amigo de reyes, a los ancianos y a la nación de los judíos. (I Macabeos 13, 36)

  • Cuando Atenobio, el Amigo del rey, llegó a Jerusalén quedó asombrado al ver la magnificencia de Simón, su aparador con vajilla de oro y plata y toda la fastuosidad que lo rodeaba. Entonces le transmitió el mensaje del rey, (I Macabeos 15, 32)

  • Antíoco pensó que se estaba burlando de él y sospechó que esas palabras eran un insulto. Como aún vivía el más joven, no sólo trataba de convencerlo con palabras, sino que le prometía con juramentos que lo haría rico y feliz, si abandonaba las tradiciones de sus antepasados. Le aseguraba asimismo que lo haría su Amigo y le confiaría altos cargos. (II Macabeos 7, 24)

  • Entonces les envió una embajada para proponerles una reconciliación en condiciones razonables, prometiéndoles que induciría al rey a hacerse amigo de ellos. (II Macabeos 11, 14)

  • que abandona al amigo de su juventud y olvida la alianza de su Dios: (Proverbios 2, 17)

  • El que disimula una ofensa cultiva la amistad, volver sobre la cosa separa del amigo. (Proverbios 17, 9)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina