Encontrados 13 resultados para: Suertes

  • En seguida echará las suertes sobre los dos chivos: una suerte para el Señor y la otra para Azazel. (Levítico 16, 8)

  • Allí Josué echó las suertes entre los israelitas, delante del Señor, y repartió el territorio a cada una de las tribus de Israel. (Josué 18, 10)

  • Se echaron suertes para cada puerta, entre todas las familias, tanto las pequeñas como las principales. (I Crónicas 26, 13)

  • En cuanto a la ofrenda de leña, los sacerdotes, los levitas y el pueblo hemos echado suertes para que cada una de nuestras familias la traiga por turno a la Casa de nuestro Dios, en los tiempos fijados, año tras año, a fin de que arda en el altar del Señor, nuestro Dios, como está escrito en la Ley. (Nehemías 10, 35)

  • Por eso el Señor ha establecido dos suertes, una para el pueblo de Dios y otra para todas las naciones paganas. (Ester 10, 10)

  • Y estas dos suertes se han verificado en la hora, el momento y el día del juicio delante de Dios y para todos los pueblos. (Ester 10, 11)

  • ¡Ustedes echarían suertes sobre un huérfano y traficarían con su propio amigo! (Job 6, 27)

  • Las suertes se echan en los pliegues del manto, pero la decisión viene del Señor. (Proverbios 16, 33)

  • Las suertes ponen fin a los litigios y deciden entre los poderosos. (Proverbios 18, 18)

  • Echaban suertes sobre mi pueblo, cambiaban a un muchacho por una prostituta, vendían a una muchacha por vino y se lo bebían. (Joel 4, 3)

  • El día en que estabas allí presente, cuando los extranjeros llevaban a su ejército cautivo, cuando extraños franqueaban sus puertas y echaban suertes sobre Jerusalén, tú también eras como uno de ellos. (Abdías 1, 11)

  • Luego se dijeron unos a otros: "Echemos suertes para saber por culpa de quién nos viene esta desgracia". Así lo hicieron, y la suerte recayó sobre Jonás. (Jonás 1, 7)


“Deus sempre nos dá o que é melhor para nós.” São Padre Pio de Pietrelcina