Encontrados 12 resultados para: cabellera

  • y es al día séptimo cuando se afeitará todo el pelo, la cabellera, la barba y las cejas, es decir, se afeitará todo su pelo; lavará también sus vestidos, bañará su cuerpo en agua y quedará limpio. (Levítico 14, 9)

  • El sacerdote que ha sido puesto más alto que sus hermanos, sobre cuya cabeza se ha derramado el óleo de unción, y que ha sido consagrado para revestir las vestiduras, en ningún caso tendrá su cabellera suelta ni rasgará sus vestidos. (Levítico 21, 10)

  • Todo el tiempo de su consagración como nazireo, no se pasará la navaja por su cabeza; hasta que pasen los días de su consagración, será persona consagrada y se dejará crecer la cabellera. (Números 6, 5)

  • Entonces el nazireo se rapará su cabellera a la entrada de la Tienda de las Citas; tomará su cabellera de nazireo y la echará al fuego que arde debajo del sacrificio de comunión. (Números 6, 18)

  • Ella lo adormeció, tejió las siete trenzas de su cabellera en la urdimbre y las apretó con el peine. Luego gritó: «¡Aquí vienen los filisteos!» Sansón despertó y arrancó la urdimbre con sus trenzas. Y así Dalila no conoció el secreto de su fuerza. (Jueces 16, 14)

  • Dalila adormeció a Sansón sobre sus rodillas y llamó a un hombre que le cortara las siete trenzas de su cabellera. Inmediatamente empezó a debilitarse y se le fue su fuerza. (Jueces 16, 19)

  • La cabellera de Sansón comenzó a crecer en cuanto se la raparon. (Jueces 16, 22)

  • y después, acercándose al lecho, tomó al hombre por la cabellera y dijo: «Señor, Dios de Israel, dame fuerzas en este momento.» (Judit 13, 7)

  • Se había quitado su elegante vestido y se había puesto ropa de luto hecha tiras. En lugar de sus caros perfumes se había cubierto la cabeza de cenizas y polvo. Humilló ásperamente su cuerpo y con las desatadas trenzas de su cabellera cubrió su atrayente figura. (Ester 14, 2)

  • Tu cabeza se yergue: es el Carmelo, tu cabellera tiene reflejos de púrpura; un rey se halla preso en sus trenzas. (Cantar 7, 6)

  • y crece como una hierba del campo! Entonces comenzaste a crecer, te desarrollaste, te convertiste en una jovencita, tu pecho se afirmó y tu cabellera creció; pero estabas desnuda, no tenías nada. (Ezequiel 16, 7)

  • mientras que la mujer se siente orgullosa de su cabellera. Precisamente usa el peinado a modo de velo. (1º Carta a los Corintios 11, 15)


“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina